La mansión en Las Vegas, que Michael Jackson alquiló en 2008 y en la que culminó sus días, se ha vendido por 3,1 millones de dólares (unos 2,2 millones de euros). A la residencia no le falta detalle: tiene siete suites, dos despachos, un ascensor, un teatro y una terraza interior para una orquesta. También cuenta con gimnasio, pista de baile y un dormitorio principal de 609 metros cuadrados, o sea otra mansión. Los compradores permanecen en el anonimato, según el diario Las Vegas Sun. El artista, fallecido en junio, será homenajeado en la 52º edición de los premios Grammy, que se celebrarán el próximo domingo. Se proyectará un vídeo en 3D con imágenes inéditas, que iban a apoyar la presentación del tema Earth song.
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